El mejor método es invertir en un bote de descongelante y un rascador. Pulveriza el descongelante por todo el parabrisas y rasca el hielo derretido con el rascador. No caigas en la tentación de utilizar una tarjeta de crédito o la caja de un CD, ya que podrías raspar el parabrisas.
La mayoría de los lavaparabrisas de calidad también contienen descongelante. Te ayudará a eliminar el hielo del parabrisas y evitará que la botella de lavado y las boquillas de pulverización se solidifiquen.
Asegúrate de desempañar todo el parabrisas (no sólo la pequeña zona situada delante del asiento del conductor), así como el resto de ventanillas y retrovisores. Hazlo antes de ponerte en marcha, ya que, de lo contrario, tu visibilidad podría verse peligrosamente limitada.
Lo que no debes hacer
❑ En primer lugar, ignora todos los consejos sobre hervidores de agua. Puede parecer lógico que el agua caliente derrita el hielo, pero si el agua está demasiado caliente podría romperte el parabrisas. Es más, el agua podría derramarse por el suelo y congelarse, formando un peligroso trozo de hielo.
❑ Estar sentado en el coche con el motor en marcha y el ventilador encendido (mientras esperas a que la calefacción de tu coche descongele los cristales) no sólo lleva mucho tiempo, sino que además gasta combustible y aumenta el desgaste del motor.
Tampoco es buena idea intentar quitar el hielo o la nieve con los limpiaparabrisas, ya que pueden estropearse rápidamente.