La primera pila se inventó en el siglo XVIII y desde entonces se ha convertido en la fuente de energía más extendida para diversos aparatos domésticos e industriales. El funcionamiento de las pilas es un proceso interesante. Una pila o célula electroquímica convierte la energía química en energía eléctrica.
Hay dos tipos principales de pilas, las primarias (recargables) y las secundarias (no recargables), mientras que hay dos tipos básicos de pilas, las de célula seca y las de célula húmeda. Estos tipos se distinguen en función del proceso químico elegido para el diseño de esa pila en concreto. Existen otros tipos de pilas: electrolíticas, de flujo, galvánicas, de combustible, voltaicas, etc.
Información sobre una pila húmeda
En primer lugar, es importante entender que pila y batería son palabras sinónimas, pero batería es un término bastante común utilizado por mucha gente. Una pila húmeda también recibe varios nombres, como pila ventilada y pila inundada. Se llama pila inundada porque todas las partes internas de la batería están cubiertas de líquido. Se llama célula ventilada porque se producen ciertos tipos de gas cuando se utilizan estas baterías. Una pila húmeda funciona con un electrolito líquido y suele prepararse en vasos de precipitados en el laboratorio. La mayoría de las pilas húmedas son un disolvente de plomo y ácido sulfúrico. La pila húmeda más básica puede contener finas placas de cobre y zinc parcialmente sumergidas en zumo de limón. Estas pilas tienen un extremo expuesto que se conecta a un dispositivo mediante cables. Las pilas húmedas están selladas y no deben quedar expuestas por razones de seguridad.
Mantenimiento
Después de un cierto número de usos, las pilas húmedas se agotan y son incapaces de suministrar la electricidad suficiente, necesaria para cumplir sus funciones. La razón principal es que las placas utilizadas se desprenden durante el ciclo de descarga y carga de las pilas. Este ciclo hace que las celdas se expandan y contraigan constantemente, reduciendo su tamaño y matándolas poco a poco. Este proceso se acelera en zonas cálidas y húmedas, y también mueren como consecuencia de vibraciones excesivas, uso excesivo, sobrecarga, etc.
La primera razón por la que las pilas mueren es porque no se cargan correctamente y se mantienen descargadas, o parcialmente cargadas, de forma repetida. Por lo tanto, las baterías deben cargarse por completo en cuanto se descargan. También puede comprobar el estado de la batería con un densímetro, que le indicará el grado de humedad de las celdas. Comprueba que los cables estén bien apretados y que la parte superior de la batería esté limpia. No juegues con los cables cuando las baterías se estén cargando, ya que esto podría afectar al voltaje de la batería. No experimente nunca con la junta y preste atención a la advertencia de seguridad suministrada con todas las baterías. El plomo y el ácido sulfúrico utilizados en estas baterías son cáusticos por naturaleza y pueden provocar una intoxicación grave por plomo y combustión.
Si abre accidentalmente el precinto de una batería de pila húmeda, llame inmediatamente a los bomberos y deje que ellos resuelvan el problema.