Cada vez que pensamos en realizar tareas de mantenimiento en nuestros coches, es muy probable que el proyecto se ponga en marcha. Para desmontar una rueda, el neumático debe estar al menos a unos centímetros del suelo. Para cambiar el aceite, según el coche, hay que levantarlo al menos 30 centímetros. Levantar un coche es una cosa, pero no es suficiente para hacer bricolaje con seguridad: NUNCA (y no nos cansaremos de repetirlo) pongas ninguna parte de tu cuerpo debajo de un vehículo apoyado sólo en un gato. Si estás haciendo algo debajo de un vehículo levantado, debe estar soportado por puntales. De lo contrario, los resultados podrían ser desastrosos.
Tabla
¿Cómo se coloca un coche sobre un gato?
1. Trabaja con un amigo
Mientras revisa o repara su coche, trabaje con un amigo si es posible. Sus conocimientos sobre coches son buenos, pero no necesarios. Si tienes que darles algo enlatado, embotellado o en corcho, es una inversión que merece la pena, ya que pueden animarte, hacerte compañía o pasarte las herramientas. En caso de emergencia, tu amigo puede llamar al número de emergencias ¡y posiblemente salvarte la vida!
2. Aparca en un terreno llano
Los gatos y los caballetes sólo funcionan verticalmente, y la misma gravedad que mantiene el coche firmemente en su sitio sobre el pavimento tirará con la misma facilidad de un gato o caballete en una pendiente. Aparca siempre tu coche en un terreno llano.
3. Lee el manual
Lea los manuales de su vehículo y de su equipo de elevación y apoyo. Cada vehículo tiene puntos de elevación sugeridos, así como puntos sólidos de suspensión y bastidor. Si no tienes un manual del propietario, cómprate uno en serio o búscalo en Google. Es posible que puedas descargarte uno gratuitamente. Además, lee y sigue los límites de capacidad y las instrucciones de seguridad del gato y el caballete. Una buena regla general es utilizar un gato y un caballete con una capacidad de al menos el 50% del peso de tu coche.
4. Monte su equipo
Dependiendo del trabajo, puede que necesites levantar una sola rueda, la delantera o la trasera, o el coche entero. Prepara el equipo de elevación y apoyo. Levante el coche con un gato de calidad. Si sólo vas a levantar un extremo del coche, necesitarás dos soportes. Si vas a levantar todo el coche, utiliza cuatro puntales. En terrenos blandos, como el asfalto o la hierba, un contrachapado grueso puede evitar que se hundan.
5. Calzar las ruedas
Ponga la transmisión en marcha o en estacionamiento, y calce la rueda de delante de donde está levantando. Utiliza dos calzos, delante y detrás del volante, para evitar que el coche se mueva hacia delante o hacia atrás. Los calzos de plástico, metal, goma o madera son buenas opciones. Las rocas, los bloques y los ladrillos no son una buena elección, ya que pueden derrumbarse o resbalar.
6. Levanta el coche
Levanta el coche utilizando un punto de elevación fuerte, dejando espacio suficiente para que el puntal soporte el coche. Si sólo vas a levantar una rueda, levanta esa esquina del vehículo. Si vas a levantar toda la parte delantera o trasera, elige un punto de elevación en el centro de la suspensión delantera o trasera o del bastidor.
7. Apoye el coche
Apoye el vehículo con montantes. Si apoya una esquina del vehículo, coloque el montante debajo del punto de elevación y ajuste la altura bloqueándolo con el pasador o el trinquete, según corresponda. Si apoya toda la parte delantera o trasera del vehículo, utilice montantes por pares, preferiblemente ajustados y bloqueados a la misma altura. No utilice tacos de madera para ganar altura extra, ya que un taco de madera puede resbalar o partirse — compre montantes más altos. Baja el gato lentamente hasta que todo el peso del coche esté sobre el gato.
Si vas a levantar todo el coche, levanta y sujeta primero la parte delantera, hasta la altura máxima del gato. A continuación, levanta y sujeta la parte trasera del coche utilizando un segundo par de soportes de gato.
8. Compruebe cada gato
Compruebe que todos los caballetes soportan el vehículo: no deberían moverse al sacudirlos. Si hay movimiento, vuelva a levantar la cuña y muévala una muesca. Compruebe de nuevo que todos los gatos están correctamente ajustados.
9. Sacuda el coche
Sacuda suavemente el vehículo para asegurarse de que está bien sujeto. Compruebe que todos los soportes están apoyados en el suelo y que no se mueven al sacudir el vehículo. Un caballete inclinado puede derrumbarse, ya que no está diseñado para sostener una carga en ángulo. Una vez que tu coche haya superado la prueba de sacudida, podrás trabajar en él con seguridad.
10. Empezar a trabajar
Mecánicos, aficionados, manitas y gente con prisas han dañado vehículos, e incluso se han lesionado o han matado a otras personas, por saltarse este paso de seguridad crucial. No importa la experiencia que tengas o la rapidez con la que hagas el trabajo, recuerda siempre apoyar bien el vehículo siempre que tengas que levantarlo.